martes, 5 de noviembre de 2013

Por fin conseguí el famoso Matadero Cinco. Ni siquiera pudo ser en La Central, donde sí compré otros del autor. Tuve que irme a Bajo el volcán, en pleno barrio de Lavapiés, en una calle perdida repleta de comercios orientales. En una librería dominada por los discos y la música, con una bóveda rebosante de humedad atestiguada por las fotos y vídeos del Ipad mini. Allí, acompañado de Santi, en una aventura perdurable, estaba esperando Matadero Cinco. No decepciona. Vonnegut aplica la sátira, el humor, incluso la ciencia ficción para explicar lo que nadie quiere entender, mucho menos en su época de postguerra: que los conflictos no se ganan ni se pierden, se sufren. Y millones de personas anónimas lo han pagado con su vida, y otros tantos, como el protagonista principal, Billy Pilgrim -o el autor- con la destrucción de sus vidas, su memoria y su futuro. Bajo los escombros de ese bombardeo apocalíptico de Dresde en 1945, absurdo incluso desde el punto de vista militar, yace la esperanza de todos. Ni los soldados son héroes -tantas veces son mocosos harapientos- ni las guerras nos enseñan nada, excepto a morir como animales en el matadero. Estilo directo, ágil, periodístico, humor sarcástico, a menudo negro, combinado con una crítica profunda de la sociedad establecida, los valores y la moral intocables de los estadounidenses y, por ende, de toda la civilización occidental.

domingo, 3 de noviembre de 2013

Rascacielos de Madrid (Paseo de la Castellana)

























































































































Por orden de aparición: Torres de Colón, Torre BBVA, Torre Titania (por delante y por detrás), Torre Picasso, Torre Mahou, Torre Europa, Obelisco de Calatrava, Torre Puerta de Europa II, Torre Puerta de Europa I, Torre Espacio, Torre de Cristal, Torre PwC, Torre Cepsa.

viernes, 1 de noviembre de 2013

Rascacielos de Madrid (Gran Vía, Moncloa, M-30 y Avda. de América)










































Por orden de aparición: Edificio Metrópolis, Edificio Telefónica, Edificio Carrión (izq.), Palacio de la Prensa (der.), Edificio España, Torre de Madrid, Faro de Moncloa, Torrespaña ("El Pirulí"), Edificio Mapfre (izq.), Edificio Génesis (c.), Edificio Bronce (der.) y Torres Blancas.

Metro de Madrid (series)




En orden de aparición: serie 2000-A (estación de Atocha Renfe), serie 8000 (estación de Alcorcón Central), serie 302 (Metro Ligero (ML)) (estación de José Isbert), serie 7000 (estación de Plaza de España), serie 3000 (estación de Príncipe Pío), 2000-B (estación de Alonso Martínez), serie 6000 (estación de Plaza de Castilla) y serie 8400 (estación de Plaza Elíptica).
No dejéis de leer "Correr", de Jean Echenoz, un librito sobre Emil Zátopek. Una pasión única e inocente, eterna: correr y correr, sin dejar nunca de hacerlo, huyendo a un tiempo de cualquier implicación política. Además de su valor literario, nos lleva a reflexionar sobre una actitud que no es demasiado popular, pero cuyos efectos serían más efectivos de lo que creemos: decir NO, en lugar de vagar de un sitio para otro protestando por lo que no tenemos. ¿No sería mejor dejar claro, en todo momento, lo que NO estamos dispuestos a perder? Si tenemos poco que desear, poco nos pueden quitar. Ese parece ser el leiv motiv de Zátopek, aunque él no sea muy consciente, porque no tiene tiempo excepto para correr, sin necesidad de llegar a ningún sitio que no sea la meta del estadio. Incluso entonces, sigue corriendo, como si nada, como si el objetivo no fuera ese, como si el final estuviera escrito en otra parte.